Viernes, 10 de enero de 2014
Hola!... Pues aquí les paso a dejar la primer entrada de este blog; no es mi primer fanfic, la verdad había empezado otro hace tiempo, pero por decidia y falta de imaginación no logre terminarlo, después se me ocurrió este otro y bueno para que doy mas largas; aquí se los dejo espero les guste. Comenten por favor, así me ayudaran a saber en que voy mal :) .
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Bueno el tema del fic no se como se me ocurrió, tal vez solo quería ser popular xD.. jaja pero bueno espero que les guste y a ver si logro hacer que el tema cuadre con la historia...en fin les dejo el prólogo.
Este fue el primer fanfic que en aquellos tiempos comencé a subir justamente en este mismo blog, lo he traído una vez más, renovado y actualizado, con todo mejorado, así pues espero que les guste, a quienes ya lo leyeron espero que los pequeños cambios sean de su agrado.
Douzo !!
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Personajes: Satoshi Ohno, Ann-chan (OC)
Género: Romance, Drama.
Categoría: Hombre / Mujer
Extensión: Serial.
Resumen: Ann-chan, la heroína de la historia, narra su llegada a Japón.
Personajes: Satoshi Ohno, Ann-chan (OC)
Género: Romance, Drama.
Categoría: Hombre / Mujer
Extensión: Serial.
Resumen: Ann-chan, la heroína de la historia, narra su llegada a Japón.
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Prólogo
¿Fue difícil llegar a donde estoy ahora?... No... en realidad no.
La mayor parte de vida fue sencilla; mis días en el colegio fueron simples y normales, siempre tendía a destacar en las materias, mis calificaciones eran excelentes, todos me felicitaban y se enorgullecían de mi. La verdad nunca le di demasiada importancia, mis notas eran buenas pero no porque me esforzara, siempre fue así desde que tenia memoria, podía recordar fácilmente todo lo que pasaba en mi entorno; si mi mamá decía una palabra que me era desconocida, la recordaba y cuando menos lo esperaban la usaba, se sorprendían mucho y preguntaban en donde la había escuchado. Mi vida en la universidad fue en parte normal, entré a la carrera de administración, pero cuando se dieron cuenta de mi capacidad para retener la información y habilidades -o por lo menos así es como le llaman- me ofrecieron cambiar a la carrera de Economía, acepté puesto que es el ramo que me interesa,. Terminé la universidad antes de lo que esperaban, mis notas eran altas así que me gradué antes por saltar semestres, aunque no me dediqué de inmediato a eso, tenia tiempo de sobra así que no sabia que más hacer, en uno de esos días en que me encontraba paseando por el centro visualicé un letrero que decía "aprenda japonés con maestros japoneses" me interesó un poco, así que anoté el numero que ponían y seguí mi camino.
Me olvide de la idea pronto y poco después vi algo que me interesó aún más, " Carrera de conducción, producción y dirección. ¿Eres enérgico(a), tienes liderazgo, creatividad y gusto por el mundo del cine, teatro, radio y televisión? Entonces esta carrera es para tí, ¿qué esperas?! Pregunta por nuestros costos e inicio de cursos!". Me acerqué y decidí entrar, salí de ahí con una boleta de pago de inscripción, no sé porqué pero quería hacer algo más, conocer más mis habilidades, conocer mis límites, así que decidí cursar la carrera; al poco tiempo me dí cuenta que eso era exactamente lo que buscaba, lo que quería hacer; me encontraba a la mitad de mi carrera cuando de pronto encontré un pequeño papel con algo escrito en él, era un número telefónico, mas no decía a quien pertenecía; decidí llamar para saber de quien era
* tono de llamada *
— Escuela de idioma japonés buenas tardes - En un momento recordé que tiempo atrás me había interesado por ese anuncio.
—Hola... Hola…
—Eh... sí, disculpe, deseo información sobre los cursos.
— Sí señorita permítame... tenemos cursos semanales, pueden ser de dos días por semana o uno como a usted mejor se le acomode.
— ¿Podría darme la dirección para hablar mejor?
— Por supuesto, ¿tiene donde anotar? - Al término de que me dio la dirección nos despedimos y colgamos, tomé mi abrigo y me dirigí al lugar de la escuela; salí de ahí con una boleta de inscripción, eran cursos de sábados y domingos durante seis meses, a mi carrera aun le quedaban tres años así que decidí llegar los más lejos en la escuela de idiomas los más que pudiera en ese tiempo. Al pasar el tiempo me parecía muy fácil llevar mis carreras, había conseguido un trabajo a tiempo parcial en un restaurante, trabajaba a sueldo fijo mas propina, pagaban muy bien, he de admitir, y al término de mi carrera fui contratada por una televisora local casi minutos después de la graduación y fue así que comencé mi carrera de conducción a mi edad de apenas 23 años. Se me daba muy bien la verdad, la mayoría de mis compañeros tenían años en la carrera y se fueron haciendo conductores a lo largo de su carrera, en cambio yo lo había hecho directamente saliendo de la graduación y no solo eso, había conseguido el puesto de conductor principal del programa. Poco a poco se me fue permitiendo hacer más cosas, iba creciendo rápido y por fin se me dió la oportunidad de producir y dirigir una telenovela. Comencé un poco nerviosa pero firmé y concentrada en hacerlo perfecto, mas que perfecto, al término de grabaciones todos me felicitaban, hacía mi mejor esfuerzo pero como siempre todos decían que era excelente en lo que hacía; al cabo de un tiempo fui contratada más para producción que para conducción y entonces comenzamos la grabación de un remake de una telenovela japonesa, la historia me interesaba muchísimo así que quise hacer las cosas perfectas, sin saber que uno de los que estuvo en la grabación de la versión japonesa me observaba.
—Tu talento es impresionante — Me decía mientras se acercaba a mi — A tu corta edad y ya eres excelente, me interesan mucho tus habilidades, ¿te gustaría ir a Japón y trabajar para mi?"— Yo por mi parte quedé sorprendida de verle... era un hombre de aproximadamente 35 o 40 años de edad, por lo menos eso aparentaba porque la realidad era que tenía ya poco más de 50, me fue impresionante el ver como su apariencia decía que tenía menos; me detuve a reflexionar por un momento.
—Si no estas segura puedo esperar por una respuesta, de cualquier manera aún te falta terminar este proyecto, pero realmente me gustaría que me ayudaras con uno que estoy a punto de aceptar en Japón. Quería encontrar a alguien que me diera algo nuevo, algo fresco e innovador y esa persona eres tu, así que no pienses que te dejaré ir tan fácil."— Terminó la conversación y se alejó. Durante días lo estuve pensando hasta que decidí que seria bueno cambiar de aires, así que cuando terminamos grabaciones, tome el móvil y le llamé.
* tono de llamada *
— Mi querida Ann-chan...- Así es como el había decidido llamarme, no me molestaba, en realidad me agradaba —...si estás llamándome es porque has aceptado mi oferta de trabajo... ¿cierto?-
— Bueno, creo que seria interesante conocer el país del sol naciente - Contesté y después de dialogar un poco e incluso hacer un par de bromas quedamos de vernos en un café cercano para hablar mejor sobre el contrato, la paga y el traslado entre otras cosas. Al terminar nuestra conversación, me entregó un pequeño cuestionario.
—Es algo que debes llenar para tramitar tu visa especial, aunque sea yo quien te pida para que vayas a trabajar allá, debes llenar este cuestionario.— En el mismo que me entregaba venían preguntas como si tenia alguna enfermedad venérea, mi tipo de sangre, mi seguro social, mis conocimientos de inglés, si conocía el idioma Japonés, lo llené de inmediato y se lo entregué de vuelta.
Y así fue como comencé mi vida en Japón. Llevo ya cuatro años y nueve meses aquí y bueno, es una vida llena de plenitudes, aunque al principio tuve mis tropiezos, fui saliendo adelante poco a poco, llegué a formar mi propio equipo y a cualquier proyecto que me llamaran, ellos iban incluidos en el paquete. El primer año fue el mas difícil de todos, dimos demasiados traspiés así que fui concentrándome más en hacerlo todo a la perfección y así fue que al cabo de unos meses llegamos a ser como engranes, cada uno con su función especifica pero siempre dependiendo el uno del otro para poder moverse de una excelente manera. Llegué a ser la mujer productora y directora más joven ahí, un mundo en donde prácticamente reina el hombre; aun así era reconocida y respetada; aunque llegué a tener fama de ser una chica fría, de carácter firme y difícil de quebrantar, fue así que después de tres largos años sin tener un descanso decente estábamos ya apunto de terminar el proyecto que teníamos en ese entonces.
Bien este fue solo el prólogo xD... creo que me pasé, pero al comenzar a escribir me emocioné y bueno así quedó... espero le haya gustado aunque sea un poco. :)
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Definitivamente me extendí con el prólogo jajaja, pero lo vuelvo a leer y me vuelvo a emocionar como la primera vez cuando estaba recién salido de mi imaginación. No olviden comentar o les hago de nuevo el estilo del xodaa jajaja. = qué tal bitches= jajaja, es advertencia¿?
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